Por Daniel Mateo y María González
Este trabajo está hecho a base de líneas que van cambiando de posición y de color, pasando por toda la escala de grises desde el negro al blanco, dando la sensación de que la imagen está dividida en segmentos.
Está inspirado en el tema de las últimas clases: el espejo. La división del lienzo está hecha en fragmentos desiguales, al igual que lo estaría en un espejo roto, y simboliza al ser humano y su extrema fragilidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario